viernes, 7 de mayo de 2010

gobierno de 1940-1946


Durante su gobierno su lema fue “Unidad Nacional”, y esto estaría presente en todas las políticas y los actos de su gobierno. Desde su campaña electoral se comprometió a darle énfasis a la conciliación de los intereses que defendían las diversas clases sociales con el fin de crear condiciones favorables a la industria del país.

Con ese enfoque se sustentaba el programa del Segundo Plan Sexenal, en el cual se proponía consolidar las acciones mas importantes del gobierno de Cárdenas pero viendo ahora hacia las nuevas posibilidades definidas de progreso. El programa seguía manejando el concepto de la lucha de clases, solo que no se consideraba ni posible ni conveniente conducirla hasta sus ultimas consecuencias. Por lo tanto se garantizaba que el gobierno de Ávila Camacho no sería hostil a la empresa privada, siempre que ésta respetara las justas aspiraciones populares.

En el plan: se abandonó lo calificativo de socialista al hablar de educación, en lo referente a lo agrario, se continuaría apoyando al ejido colectivo, pero al mismo tiempo se prometía que se habría de definir claramente el estatuto de la pequeña propiedad. En el aspecto social, señalaba algunas reformas importantes, como la creación del Seguro Social, el establecimiento de un salario mínimo por zonas geoeconómicas y el otorgamiento de los derechos políticos a las mujeres.

Uno de los proyectos más importantes de la política del gobierno de Ávila Camacho fue consolidar el Partido de la Revolución, de modo que fuera el aparto electoral del Estado lo cual implicaba hacer unos cambios tanto en lo concerniente a la cuestión doctrinal como en la organización. Manuel Ávila Camacho consideraba necesaria la reorganización del PRM, por que la imagen del radicalismo que presentaba no concordaba con la nueva política de conciliación.


Durante el gobierno de Ávila Camacho se mostró la tendencia hacia el civilismo, sobre todo a partir de la supresión del sector militar en el PRM. Quedaba manifiesto que al fortalecerse el estado y al institucionalizarse la Revolución en una amplia base social compuestas por las capas medias de las sociedad, no era ya necesario que los presidentes fueran militares, sino que, debería propugnarse por el civilismo, sobre todo en momentos en que entraba a la vida política nacional una nueva generación que no había participado en la Revolución armada.


Economía y Sociedad

Desarrollo industrial y proteccionismo. Durante el régimen de Manuel Ávila Camacho se prestó especial atención al fomento de la industria privada.

Durante ese periodo el papel de Estado fue significativo como promotor del desarrollo industrial y sus funciones consistieron en: 1) proporcionar el crédito que los empresarios requerían sobre todo en las industrias básicas, para lo cual se favoreció la expansión y consolidación de la banca privada.

2) crear una amplia infraestructura para lo cual se empleó el 55.1% de presupuesto en transportes y comunicaciones

3) establecer una política de impuestos bajos y extensiones fiscales.

4) aplicar una política arancelaria proteccionista, fundamentalmente cuando la industria resultó afectada por el acuerdo comercial con Estados Unidos.

En cuanto a la producción industrial, tomadas en conjunto la industria manufacturera y la de construcción, el periodo registra un aumento del 60%, siendo las industrias más dinámicas las siguientes: alimentaria, textiles, productos químicos, fundición y manufacturera de artículos metálicos, madera y muebles, y la de construcción.

La minería. Desde 1933 la producción minera había empezado a recobrarse de la caída que sufriera en 1930, y para 1937 se encontraba en franca recuperación, aún cuando no llegó a alcanzar los niveles de 1929, que fueron los más altos de su historia.

Comercio exterior. El comercio exterior estuvo considerablemente influido por el conflicto bélico mundial. A partir de 1939 se hizo manifiesto el cambio en la distribución geográfica del comercio exterior de México; Al final del sexenio de Ávila Camacho, menos del 4.6% de las importaciones provenían de Europa y se enviaban allá apenas un 2% de las exportaciones mexicanas; una situación similar se presentaba en las relaciones comerciales con Japón.


Problemas financieros; la inflación, causas y medidas de solución. En el aspecto de las finanzas, el sexenio de Manuel Ávila Camacho se caracterizó por el crecimiento del proceso inflacionario que se había iniciado en el régimen anterior, principalmente a causas de la política cardenista, que destinó buena parte del presupuesto a la construcción de obras públicas encaminadas a fortalecer al aparato productivo, recurriendo al financiamiento con préstamos al Banco de México, cuyo monto era superior a los ingresos de Estado.

5 comentarios:

  1. su trabajo está bien padre¡¡ y tiene información de utilidad para nosotros; además de que es clara y concisa.

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  2. Yo coincido con lo que dice Giselle..

    Felicidades por el blog esta muy interesante..

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  3. ESTA INFORMACION ESTA CLARA Y NOS PUEDE AYUDAR YA QUE VIENE LO MAS IMPORTANTE ME GUSTA QUE VENGA MUY RESUMIDAD Y EN ESPECIAL ESPECIFICAR LOSPUNTOS IMPORTANTES DE LA ECONOMIA Y LA POLITICA DE ESTE PERIODO

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  4. Esta bien la información pero, le falta más imagenes.

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  5. Me parece un buen resumen del periodo presidencial de Manuel Avila Camacho, Yo sugeriría que incluyeran las fuentes Bibliográficas que sustentan su investigación, creo que he notado algunos datos que fueron extraídos de Wikipedia.org, no creo que sea malo pero habría que citarlo. Para ahondar más en su investigación habría que tomar artículos académicos más académicos. Pero lo veo bien.

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